Reseña del libro "Hija única" de Guojing

"Hija única"

Guojing

Título: Hija única

Autor: Guojing

Páginas: 108 apróx.

ISBN: 978-8416427093

Género: Infantil, fantasía, novela gráfica.
Colección: Lejano oriente

Edad: + 6

Editorial: Pastel de Luna

P.V.P: 19,95€

Sinopsis:

Una niña perdida…
Un misterioso ciervo…
Un mundo mágico y extraño…
Una huida a través de la imaginación.

¡Hola, hola! Hoy os traigo la reseña de un cuento y a la vez novela gráfica. Un cuento que desde el primer momento en que lo vi supe que me iba a marcar, y mucho. Y es que "Hija única", de Guojing y publicado por Pastel de Luna como si nombre bien índica, es ÚNICO y MÁGICO.  No imaginaba que tras esa belleza de portada se escondería una historia tan tierna y que expresa tanto sin palabras. Sí, porque "Hija única" no tiene texto (salvo una pequeña introducción de la autora en la que nos explica que se basó en su propia experiencia para crear la historia); "Hija única" es una novela gráfica de una delicadeza y exquisitez como en años no he visto en un mundo onírico que bien puede recordar a clásicos como el de "Alicia en el País de las Maravillas" de Lewis Carrol.

Desde aquí, quiero dar gracias a la editorial por el ejemplar y también por traernos a España esta exquisitez para los amantes de las ediciones cuidadas, de las ilustraciones, la sencillez y la belleza.

Sola y aburrida, cuando sus padres se marchan de casa, una niña pequeña echa un vistazo a un album de fotografías familiares. Nostálgica, decide ir a visitar a su abuela. Para ello deberá coger el autobús. Sin embargo, el viaje no acaba como ella imaginaba y se queda dormida en el trayecto. Cuando despierta no sabe dónde está y terminada perdida en el bosque. Será en ese omento en el que se encuentre con un ciervo de grandes cornamentas que, en vez de asustarla, le inspira confianza. Un ciervo que la llevará a un mundo inimaginado, diferente y bello en el que hará nuevos amigos, pero que no le harán olvidar que su deseo es regresar a su hogar.

Lo primero que nos encontramos es una edición muy muy cuidada, en tapa dura, en blanco y negro solo roto por el rojo del título. La ilustración de la portada es muy sugerente, ya que inspira tanta ternura que no es difícil que el libro acabe en tus manos. Si giramos y miramos la contraportada veremos que la ilustración continúa en un juego de miradas y sentimientos entre la pequeña y su nuevo amigo, el ciervo.

Guojing nos relata en esta novela gráfica una parte real y otra inventada. La autora nos cuenta cómo en los años 80 su país, China, se encontraba regido por la política que determinaba que solo se podía tener un único hijo, de ahí el título. Mientras sus padres trabajaban, era su abuela quien se hacía cargo de ella. Si su abuela no podía ir a recogerla, la niña cogía el autobús e iba a casa de ella, una niña con seis años (¡Qué locura!).

El libro no está divido por capítulos. A partir de la nota explicativa de la autora poniéndonos en situación pasamos de lleno a páginas y páginas de ilustraciones en blanco y negro de un trato exquisito, realizadas a lápiz. Y es que las ilustraciones realizadas a lápiz son mucho más dulces y tiernas y de mayor belleza, ya que el grafito siempre creará ternura en el espectador y que, a la vez, es un material que nunca falla para libros infantiles al igual que la acuarela. 

Hay ilustraciones pequeñas que cubren una página entera detallando partes de una escena hasta dibujos a página entera que invitan a que la imaginación vuele más y más.

La trama comienza con la partida al trabajo de los padres de la pequeña Guojing. Tras jugar, aburrirse y ver fotos en el álbum familiar de ella y su abuela, decide coger el autobús e ir a su casa. Pero en el trayecto se queda durmiendo y se pierde en el bosque,  (para colmo, en un frío día invernal en el que la nieve no deja de caer) donde conocerá a un ciervo que la incitará a ir tras él para llevarla de camino a casa en un viaje en el que cielo y tierra se unirán y donde la niña descubrirá que su nuevo amigo es más que un ciervo salvaje, sino alguien en quien confiar y que por muy salvaje que pueda ser un animal siempre mostrará ternura ante un pequeño.

En un mundo de nubes y estrellas conocerá también a un pequeño osito de lo más tierno y gracioso, que se unirá a la pequeña y al ciervo, y que también busca a su madre. Juntos la encontrarán, así como el camino de vuelta a casa de Guojing.

A pesar de todo, no es una historia con final triste, sino feliz y algunas de sus escenas son bastantes graciosas, como cuando la pequeña Guojing se hace una cola con un trozo de nube para tener rabito como el de el osito y el ciervo. (¡He muerto de amor con esta escena!)

La sencillez y delicadeza de las ilustraciones a lápiz de Guojing hacen que el conjunto total del libro dé como resultado una historia que va más allá del papel, que deja volar la imaginación y que permitirá crear diferentes emociones y sensaciones en cada lector al no tener texto, solo imágenes. 

Y es que Guojing ha sabido muy bien elegir la técnica para representar un dibujo onírico al igual que la historia y que no deje de transmitir bondad, dulzura, compasión y amor. El blanco y negro evoca el recuerdo. Además, el dibujo no sigue una estética propiamente definida, aunque en ocasiones pueda remitir al género manga.

¿Qué es lo que más me ha gustado? No hay nada que no me haya gustado. He de decir que incluso he llorado y he pasado horas contemplado cada una de las ilustraciones observando cada detalle. Y no solo horas, sino días. Y he esperado hasta el último momento para hacer la reseña para no tener que despegarme de la magia de este cuento gráfico.

¿Qué es lo que menos me ha gustado? No poder tener un ciervo y un osito. T.T

¿Qué más puedo decir? Que "Hija única" es un libro para niños y adultos. Que invita a ser leído con los más pequeños de la casa para sacar diferentes opiniones con ellos. Que el trato de las ilustraciones y el mimo que la autora procesa en ellas hacen de este cuento gráfico toda una obra de arte que no puede faltar en ninguna casa para ojear de vez en cuando y despejar la mente viajando a un mundo de ensueño que muchas veces olvidamos.

Por esto y mucho más, le doy mis 5 cascabeles.